Noticias GTH

Publicado el 27/Apr/20

Se desploma demanda de gasolina en México

Lo que millones de mexicanos esperaban: gasolina más barata, por fin ha ocurrido, pero porque nadie quiere llenar su tanque ahora.

Se desploma demanda de gasolina en México

Las medidas de aislamiento y sana distancia mantienen a muchos trabajadores en casa y sus autos guardados y, con la demanda deprimida, se va acumulando el combustible que no se despacha. Los precios de la gasolina han caído a niveles que creímos nunca íbamos a volver a ver. ¿Cuánto más caerán? Eso dependerá de cuánto aguanten los gasolineros.

La caída de la actividad económica y de la demanda por petróleo pone en una encrucijada a Pemex y al sector gasolinero en general. Por un lado, al no haber demanda de crudo en el exterior, México meterá más barriles a las refinerías del país y, a su vez, disminuirá las importaciones de gasolinas.

Sin embargo, el balance entre producción e importación tendrá que ser coherente con la caída del consumo de combustibles que hay en el país, por el paro de actividades ante la emergencia sanitaria del COVID-19. En mayo, se espera que la demanda de gasolinas (sin incluir diésel) se contraiga hasta 52% con relación al mismo mes del año pasado, de acuerdo con un análisis de Ramses Pech, de Caraiva y Asociados.

Si la demanda caerá más el próximo mes, ¿también bajarán más los precios de los combustibles? Es poco factible, en opinión del especialista, pues las estaciones de servicio lidian con mantener la operación y mantener el pago de costos fijos, como nómina y trámites regulatorios.

Precios a la baja

En el primer trimestre de 2020, el precio promedio de la gasolina regular ha bajado 8.3%, de 19.52 pesos por litro en enero a 17.89 pesos en marzo, de acuerdo con información de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).

Mientras que, en el mismo periodo, el precio promedio de gasolina Premium bajó 8.1%, de 20.83 pesos a 19.13 pesos por litro.

Sin embargo, en abril, a medida que han caído los precios internacionales de petróleo y avanzaron las medidas de confinamiento masivo para mitigar el número de contagios del virus COVID-19, los precios de los combustibles han tenido un descenso considerable. En algunas estaciones de la zona centro de la Ciudad de México, la gasolina regular se vende por debajo de los 15 pesos el litro.

El pasado 21 de abril, la Secretaría de Salud de México declaró la fase 3 de la epidemia de COVID-19, en la que se espera la máxima transmisión y la máxima cantidad de casos confirmados por día. Asimismo, el gobierno de la Ciudad de México anunció medidas para reducir la circulación de automóviles en la capital del país y desincentivar la movilización de personas, esperando controlar el número de contagios por la enfermedad.

¿Bajará más el precio de la gasolina?

Según un análisis de Ramses Pech, de Caraiva y Asociados, la demanda de gasolina en el país en abril caería un 37% a 474 mil barriles diarios, mientras que en mayo se desplomaría hasta 52% y en junio un 46%.

¿Esto implicará que bajaría aún más el precio de las gasolinas en estos meses? No necesariamente.

“Los precios del combustible se van a mantener tal cual como hasta ahora. El problema va a ser si la estación de gasolina va a tener suficiente dinero para poder dar un mayor descuento en venta de los combustibles, debido a la falta de demanda”, dice Rames Pech.

El especialista recuerda que solamente las estaciones de servicio ubicadas en sitios con más afluencia podrían apostar por un precio más bajo para atraer más clientes, aunque muchas otras no podrían, pues de las ventas tienen que cubrirse varios gastos, como el pago de nómina y de trámites regulatorios.

Autoridades sanitarias extendieron las medidas de sana distancia y cuarentena hasta el 30 de mayo y se espera que en junio se reanuden actividades de forma escalonada, dependiendo de la evolución de la epidemia.

Almacenamiento, otro problema a la vista

La caída de la demanda de combustible trae otro problema para el país: la capacidad de almacenamiento para guardar todo el combustible que no se demanda. Actualmente, la capacidad de almacenamiento disponible para gasolinas en el país es de alrededor de 7.5 millones de barriles, lo que daría un abasto de 9.8 días con una demanda de 790,000 barriles diarios.

Según el análisis de Caraiva y Asociados, la capacidad de almacenamiento llegaría hasta los 6.9 millones de barriles en junio. Por otra parte, la importación de combustible tocaría mínimos de 29,000 barriles diarios en el mismo mes.

Aunque las compras en el exterior bajarían en función de la poca demanda, la producción local aumentará para aprovechar la producción de crudo que no conviene vender en el exterior. El 21 de abril, un día después de que se desplomaran los precios de los contratos de futuros de mayo del petróleo WTI, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que se introduciría más crudo al Sistema Nacional de Refinación.

El reto de la administración actual será mantener un balance entre la importación, producción local y la demanda para no provocar una saturación de inventarios.

“No importa lo que baje la demanda, el problema es que la infraestructura que tenemos es insuficiente y debemos tener un buen balance”, apunta el especialista.

Lo que millones de mexicanos esperaban: gasolina más barata, por fin ha ocurrido, pero porque nadie quiere llenar su tanque ahora. Y el gobierno cumplirá con su anhelo de aumentar la producción nacional de gasolinas, obligado por las circunstancias. Un deseo se puede convertir en maldición.

Fuente: Alto Nivel

Regresar a inicio