Aún con nuevos competidores, quiere 645.8 mil mdp del mercado; prevé colocar 795.4 mil barriles de Magna y Premium en 2018.
Sin embargo, la venta de combustibles descansa en lo que aportan las refinerías que opera la petrolera (Cadereyta, Salina Cruz, Minatitlán, Salamanca, Tula y Madero) y las importaciones que adquirieron un papel relevante en el Programa Operativo Anual de Pemex.
En 2018, de acuerdo con las estimaciones del programa, casi seis de cada 10 litros de gasolina Magna consumidos en el país será producidos en México. El resto provendrá del mercado internacional, fundamentalmente del estadounidense.
La petrolera espera producir 376.7 mil barriles diarios en promedio de este tipo de combustible automotor, mientras que la demanda esperada es de 655.2 mil barriles por día.
En el caso de la gasolina tipo Premium, más de nueve de cada 10 litros serán de importación, puesto que el Sistema Nacional de Refinación redujo su producción a niveles históricos hacia finales de 2017.
La producción de Premium será este año de 5.7 mil barriles diarios, según las previsiones de Pemex, al tiempo que esperan un consumo de 139.7 mil barriles diarios en promedio.
Respecto del diésel, 65% de la demanda será cubierta por producción nacional y el restante 34.7% por importaciones.
La producción nacional se estima en 258.7 mil barriles diarios y la demanda en 396 mil barriles por día.
Para México, la dependencia del mercado externo de combustibles empezará a ser relevante, tanto por las divisas que tendrá que desembolsar y porque se espera un déficit importante en la balanza comercial.
Fuente: El Universal