La falta de capacidad de almacenamiento en el país obliga a la petrolera estatal a dejar sus compras en barcos frente a las costas de México, según personas familiarizadas con el tema.
Petróleos Mexicanos (Pemex) tiene demasiada gasolina y no tiene dónde almacenarla, lo que podría aumentar las tarifas de los buques a medida que la demanda disminuye por la propagación del coronavirus.
La falta de capacidad de almacenamiento en México está obligando a la compañía petrolera estatal a dejar sus compras de combustible en barcos frente a las costas de México, según tres personas familiarizadas con la situación y datos de seguimiento de barcos. Ahora, hasta 3 millones de barriles de productos refinados se encuentran en petroleros frente a las costas de México.
México ha experimentado tardíamente la caída de la demanda que ha afectado a otros países porque el presidente, Andrés Manuel López Obrador, inicialmente se negó a promulgar medidas estrictas en respuesta a la pandemia de coronavirus. Las ventas han caído entre 40 y 50 por ciento en algunas de las estaciones de servicio privadas más grandes de México en las últimas dos semanas, según tres importantes importadores y minoristas de combustible en México, quienes pidieron permanecer en el anonimato porque la información es privada.
La restricción es especialmente dura para Pemex, que corre el riesgo de una nueva rebaja de sus bonos a territorio de basura por parte de Moody’s, después de 15 años de caídas en la producción de petróleo y pérdidas que casi se duplicaron el año pasado. La carga de deuda de Pemex es la más alta entre todas las grandes petroleras del mundo, con más de 100 mil millones de dólares. Con las seis refinerías de Pemex operando a menos de 30 por ciento de su capacidad, la compañía importa alrededor del 65 por ciento de las necesidades de gasolina de México, principalmente de Estados Unidos.
Pemex no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
En diciembre pasado, la Secretaría de Energía de México modificó las regulaciones que habrían aumentado gradualmente el requisito mínimo de inventario de combustible del país, que actualmente se establece en cinco días para la gasolina y el diésel. Pemex tiene capacidad de almacenamiento de combustible para aproximadamente tres a cinco días.
El costo actual de mantener una carga en un barco frente a los principales puertos de México después de la fecha de entrega es de 25 mil dólares por día, según las tarifas de envío proporcionadas a Bloomberg por una persona familiarizada con el mercado.
Hay al menos seis petroleros que transportan combustible anclados cerca del puerto de Pajaritos en la costa este de México, mientras que varios petroleros más esperan en los puertos de Tuxpán, Altamira y Dos Bocas, según datos de seguimiento de barcos y dos de las personas.
Un petrolero, el British Seafarer, ha estado anclado cerca de Pajaritos durante un mes porque no hay demanda o espacio de almacenamiento para su carga de gasolina regular, dijo una de las personas.
La demanda mexicana de gasolina ha caído alrededor de 60 por ciento y de diésel 35 por ciento en la primera quincena de abril, según un estudio preliminar de Onexpo, la asociación nacional de minoristas de combustible. En algunas áreas metropolitanas, las ventas se han reducido hasta en un 70 por ciento debido al distanciamiento social para combatir la pandemia de coronavirus, según Onexpo. En las zonas rurales, la caída es menos pronunciada, alrededor del 30 por ciento, ya que el diésel sigue siendo necesario para la maquinaria agrícola y el transporte de productos.
Fuente: El Financiero