Actualmente, el gigante energético compra la molécula de gasolina a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la aditiva con una tecnología llamada active.
La empresa BP sigue analizando la importación de su gasolina a México, pero este escenario no ocurrirá, por lo menos, hasta 2019.
“Llegada la situación en donde BP decidiera traer su propio producto, no sería antes de finales del año que viene”, respondió Álvaro Granada a Forbes México.
Su estrategia, dijo, es que sus consumidores y gasolineras tengan el mejor producto, calidad y precio.
“A partir de ahí, tenemos muchas opciones para conseguirlo. Podemos hacerlo a través de compras vitales con nuestros socios locales, en este caso Pemex, o podemos importarlo”, precisó el directivo durante el aniversario de su primera estación en nuestro país.
Actualmente, el gigante energético compra la molécula de gasolina a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la aditiva con una tecnología llamada active.
BP se suma a la lista de empresas, como —Shell, Chevron, Total y Oxxo Gas— que han reconvertido estaciones bajo la bandera de Pemex a su marca. La empresa productiva del Estado ha perdido 20% del mercado en el último año, de acuerdo con la Secretaría de Energía (Sener).
ExxonMobil es una de las excepciones. Esta compañía importa, desde Texas, su propio combustible hacia la región del Bajío.
Mientras analiza el futuro de sus combustibles en México, la empresa espera cerrar 2018 con 500 estaciones. Hasta enero, reporta 160 unidades en 12 ciudades del país, con 300,000 usuarios diarios.
Las proyecciones de apertura global sumarán 3,500 en 2021, de las cuales, México tendrá al menos 1,500.
British Petroleum posee aproximadamente 18,000 estaciones de servicio en el mundo. Tiene operaciones en 72 países y emplea a 74,500 empleados.
Fuente: Forbes